
El rostro es la carta de presentación en la mujer y cuando nos referimos a la parte más sensual indiscutiblemente son los labios. La zona de los labios posee gran sensualidad y delicadeza, así que merecen ser cuidados
El rostro es la parte del cuerpo que está más expuesta a los agentes externos de nuestro ambiente. Y en oportunidades no somos conscientes de lo delicado que resultan ser ésto.
Signos de resequedad
Unos labios resecos, son muy fáciles de detectar, algunos de los signos son:
- Formación de grietas (labios partidos).
- Desprendimiento de la piel.
- Ardor.
Causas del agrietamiento y resequedad
- Los cambios bruscos de temperatura provocan sequedad, haciendo que pierdan su atractivo. Con el aumento de resequedad nuestros labios se van agrietando, causando dolor al hablar, comer e incluso sonreír.
- Sobre exposición al frío, sol, viento y aires acondicionados
- Llevar una mala alimentación, son muy importantes las proteinas y los minerales.
- Fumar
- Sensibilidad o alergia
- Cuidado siempre con tus labiales, algunos pueden contener ingredientes que provoquen resequedad.
- Morderte o pasarte la lengua.
- Los alimentos salados, picantes o bebidas ácidas.
Trucos para tener labios carnosos y bonitos
A la mayoría de las mujeres nos gusta lucir labios gruesos, carnosos y con volumen. Si no son así naturalmente o quieres realzarlos mas, hay trucos que te serán de gran ayuda.
- Ejercicios para dar volumen
Debes poner tu boca como si fueras a pronunciar una “U” manteniendo la posición un rato. Repite varias veces al día, la función es fortalecer los músculos de la boca.
- Exfoliar los labios
Para que luzcan más gruesos, un buen truco es coger un cepillo de dientes y frotarlos con él.
Con esto, se eliminarán las células muertas y activamos la circulación.
- Maquillaje.
Con un delineador del mismo color de la boca perfila el contorno de la misma, así logrará un efecto voluminoso.
Si la resequedad no desaparece quizá se deba a una enfermedad que no ha sido diagnosticada, como una enfermedad autoinmune, de ser así, debes consultar al médico para que determine la causa y consiga la solución.